Legado Sindical No. 5 Nueva Época
Septiembre de 2010
|
||||
El Comité Ejecutivo del STUNAM, por medio de una Circular de fecha primero de febrero siguiente, convocó los trabajadores de la UNAM “tomando en consideración la importancia que las actividades deportivas tienen para el desarrollo del cuerpo y la conservación de la salud ha decidido aumentar el número de equipos deportivos, para lo cual propone formar los siguientes: Alpinismo (mixto), Lucha y Pesas y Frontón a mano”, iniciando las inscripciones de inmediato. El ocho de marzo se llevó a cabo la Inauguración de Cursos en la flamante Ciudad Universitaria con la presencia del Presidente de la República Adolfo Ruiz Cortines y del Rector Nabor Carrillo Flores. A la Ceremonia de Inauguración se invitó al Comité Ejecutivo del STUNAM en representación de los trabajadores administrativos, como se puede apreciar en el siguiente párrafo del Boletín del STUNAM: “Es muy satisfactorio informar a ustedes de la atenta invitación que las altas autoridades de la Universidad hicieron a este Comité Ejecutivo para que asistiera a la Ceremonia de Inauguración de Cursos en la Ciudad Universitaria; acto en el que estuvo presente el Sr. Presidente de la República; concurrieron a dicha Ceremonia cuatro miembros del Comité Ejecutivo. El Sr. Rector, al pronunciar su discurso, hizo alusión a los representantes de los trabajadores de la Universidad, es decir, tomó en cuenta a nuestro Sindicato. Agradecemos muy cumplidamente la honrosa distinción que nos dispenso el Sr. Dr. Carrillo, ya que con ello revela que es verdadero amigo de los trabajadores Universitarios”. Para ese año en que se iniciaron las actividades en Ciudad Universitaria se hizo necesaria la contratación de personal debido a las amplias instalaciones y a la mayor cantidad de estudiantes que se inscribieron, aún cuando el cambio fue paulatino. En el Boletín del STUNAM del treinta y uno de marzo de 1954 se puede apreciar un aspecto sobre la contratación de una parte del personal que laboraría en la Ciudad Universitaria; en el sexto párrafo de la primera página se mencionaba lo siguiente: ”El Director de la Escuela de Ingeniería por conducto del Secretario de la misma, Sr. Ing. Uribe, concedió intervención a nuestro Sindicato para que se cubrieran 12 vacantes de mozos y un Administrador en esa Dependencia. Para el efecto, se efectuó un concurso en el cual participaron compañeros miembros de nuestra Organización, habiéndose otorgado las plazas a los trabajadores que por sus derechos y capacidad les correspondieron de acuerdo con el resultado obtenido en ese concurso. Agradecemos tanto al Sr. Director como al Secretario de la mencionada Escuela, las facilidades que nos brindaron en este asunto”. Asimismo, en la página dos, sexto párrafo del mismo Boletín aparece el siguiente texto: “Las autoridades universitarias se dirigieron a nuestro Sindicato para que proporcionara personal suficiente a la Institución denominada Ciudad Universitaria, a fin de cubrir plazas de Intendente, Elevadoristas, Jardineros, y Mozos. Oportunamente se envió al Sr. Secretario General, Dr. Efrén C. del Pozo, la lista de los candidatos, -familiares o recomendados de los trabajadores de la Universidad- que, mediante el examen que sustentaron públicamente, fueron seleccionados para ese efecto. Pero por disposición superior de última hora, se ha invertido el orden, es decir, se dará preferencia para ir a trabajar a la Institución Ciudad Universitaria, que es por ahora distinta a la Universidad Nacional de México, a los compañeros que ya prestan sus servicios en las Dependencias de ésta como empleados, a quienes se les concederá licencia en sus empleos, conservando su categoría y se les dará un aumento del 20%, puesto que se aclara que los puestos que ofrece Ciudad Universitaria, tienen el carácter de TRANSITORIOS. Las vacantes que dejen nuestros compañeros, serán cubiertas TRANSITORIAMENTE también, por aquellos familiares o recomendados de empleados que ya fueron seleccionados, de acuerdo con el resultado del examen que presentaron, y cuya lista obra ya en la Secretaría General de la Universidad”. Así, vemos cómo se tomaba en cuenta al STUNAM y a los familiares de los trabajadores que ya laboraban en la Institución, pese a que en 1949 se le informó al Sindicato, por parte de las autoridades laborales, que los trabajadores universitarios pertenecen a una corporación pública –organismo descentralizado del Estado- pues estaban sujetos a estatutos especiales, por lo que no tenían derecho a formar sindicatos, según lo dictaba una reforma hecha a la Ley Federal del Trabajo en 1942. Para 1954 la Oficina de Personal subió a la categoría de Departamento de Personal debido a la importancia que adquirió al aumentar las contrataciones para laborar en la Ciudad Universitaria. Con el inicio del funcionamiento de las instalaciones de la Ciudad Universitaria en marzo de 1954 con motivo de los VII Juegos Centroamericanos y del Caribe, se dispuso la contratación de personal para los juegos en el Estadio Olímpico; existían en otros estadios de la Ciudad de México sindicatos de Espectáculos Públicos y a los primeros juegos se presentó una de esas organizaciones. A mediados de abril de 1954 se decretó la devaluación del peso frente al dólar norteamericano, cuya paridad pasó de $8.65 a $12.50; el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Antonio Carrillo Flores, estimó que una devaluación tan severa aseguraría la estabilidad del peso durante largo tiempo (la siguiente devaluación fue hasta 1976). Lo anterior motivó un incremento en los precios y una disminución en el poder adquisitivo de los trabajadores universitarios, así como en el de los trabajadores de todo el país y desde luego afectó las finanzas de la Universidad. El primero de junio el Comité Ejecutivo del STUNAM informaba que se había conseguido de las autoridades que los sábados a partir de las 13 horas y los domingos de las 9 horas en adelante fueran utilizados por parte de los trabajadores de la UNAM los campos deportivos, el tanque de natación, los frontones, etc. Así mismo, se informaba que mediante el pago de cinco pesos y el examen médico respectivo podían adquirir la credencial que les permitiría cultivar su deporte favorito. Se indicaba que las inscripciones se harían por medio del Secretario de Acción Deportiva, Martín Moreno Millán, a quien deberían mostrar su credencial del Sindicato o de la Universidad que los acreditara como empleados de la Institución. El dieciocho de junio el Comité Ejecutivo informaba la manera en que se distribuirían los diez mil pesos que entregó el Rector Dr. Nabor Carrillo en calidad de donativo para la celebración del Día del Trabajador Universitario que se llevaría a cabo el sábado veintiséis de junio. La conmemoración del Día del Trabajador Universitario se realizó el veintiséis de junio de 1954, a las 11 horas; en ella, se llevó a cabo la entrega de medallas y diplomas a los trabajadores que cumplían 25 años de servicios en la Institución, en el Anfiteatro Simón Bolívar. El Banquete Anual se ofreció en el Club France a las 14.30 horas; a las 22 horas se efectuó el Baile en homenaje a los Trabajadores de la Universidad en el mismo Club France. El Carnet Musical estuvo a cargo de Chucho Rodríguez y Ramón Márquez. En este evento había una tarifa y se avisaba que los fondos que se obtuvieran serían destinados a la compra de juguetes para los hijos de los trabajadores de la Universidad para el siguiente seis de enero. “Como Invitados de Honor a la Ceremonia del Anfiteatro Bolívar estaban el Lic. Ángel Carvajal, Secretario de Gobernación; Antonio Carrillo Flores, Secretario de Hacienda y Crédito Público, el Dr. Nabor Carrillo, Rector de la UNAM, el Dr. Efrén C. del Pozo, Secretario General de la UNAM, Lic. Carlos Novoa, Presidente del H. Patronato Universitario, Lic. Alfonso Ramos Bildelberck, Tesorero de la UNAM, Lic. Rodrigo Vázquez, Jefe del Departamento Jurídico de la UNAM, Antiguos Servidores de la UNAM y Directores de Escuelas, Facultades e Institutos de la UNAM”. Luego de las elecciones para representantes de los empleados ante el Consejo Universitario, tomaron posesión el dieciséis de agosto de 1954 quienes resultaron electos: Joaquín Laguna como Consejero Propietario y como Suplente Gonzalo N. Vázquez Montaño. En el mismo mes el STUNAM realizó una encuesta acerca de la cantidad de hijos que tenía cada trabajador, dada la posibilidad de establecer una guardería en la Institución. A principios de enero de 1955 se informó -a través del Boletín Núm. 1 publicado en ese año- sobre algunas de las actividades del STUNAM. Entre ellas sobre los diez mil pesos que otorgó el Rector para la compra de juguetes de los hijos de los trabajadores, que serían entregados el veintidós de enero en las instalaciones de la Escuela Nacional Preparatoria Número Uno. Se anunciaba también que en la entrevista que iban a celebrar con el Rector Nabor Carrillo el diecinueve de enero se le presentaría un Pliego de Peticiones en el que se solicitaba lo siguiente: “1.- Que se suprimieran las categorías de mozos de 7/a., 6/a., 5/a. y 4/a., a fin de que solamente existan categorías en la Servidumbre de 1/a., 2/a. y 3/a. En el mes de junio se indicaba que como resultado de esas peticiones, ya se estaba haciendo un estudio para la retabulación de sueldos y categorías del personal administrativo, de servidumbre y académico que vendría a aliviar en algo la situación económica de los trabajadores y que el incremento que se otorgara a los trabajadores universitarios sería el mismo que se otorgara a los trabajadores del Estado. Se indicaba que ese año de 1955 se celebraría el Día del Trabajador Universitario en el Restaurant los Manantiales de Xochimilco el sábado veinticinco de junio. Se informaba también del conflicto que surgió en la Preparatoria Número 5 en el que la Unión de Profesores por motivos tácticos, pretendió agrupar en su seno a los empleados administrativos y al personal de servidumbre, así como intentar remover al delegado del STUNAM por cumplir con sus funciones como tal. Se informaba que aún no se resolvía el conflicto pero que ya estaban interviniendo las diferentes autoridades universitarias. Señalaban también que se hicieron gestiones para que se pagara oportunamente a los compañeros que habían laborado horas extras en el Departamento Escolar así como en las Preparatorias Uno y Cinco, además que se tramitaba que las Autoridades Universitarias dieran una justa compensación a los trabajadores de las Escuelas Preparatorias Uno, Dos y Cuatro que hicieron trabajos de albañilería y pintura con motivo de las obras materiales que se efectuaron en ellas. Se manifestó nuevamente que se ha apoyado a varios trabajadores prestándoles ayuda económica por enfermedad y ameritar intervenciones quirúrgicas. Se indicaba que una Comisión integrada por los compañeros Lic. Genaro Ríos, Adrián Vázquez y Gonzalo N. Vásquez quienes fueron comisionados por el Consejo Sindical para elaborar un Proyecto de Reglamento de Estímulos y Recompensas (como el que ya existía para los Trabajadores al Servicio del Estado) que ya habían entregado. También que estaba en proceso de formulación un Proyecto de Reglamento de Escalafón. Aproximadamente en junio de 1955 se terminó de elaborar el Proyecto de Escalafón para los trabajadores universitarios por parte de la Comisión designada por el Consejo Sindical, integrada por Cornelio Rosas, ex Secretario General, el Dr. Juan Coloffón y Gonzalo N. Vásquez; gracias a ese Proyecto podemos hoy conocer como estaban clasificados los grupos de trabajadores administrativos. Además, se hablaba de la creación de una Comisión Mixta de Escalafón integrada por representantes de las autoridades y el Sindicato. En julio de 1955 se presentaron conflictos intergremiales en el Estadio de la Ciudad Universitaria por la contratación de personal para los eventos que se realizarían en el Estadio y un grupo de trabajadores formó al vapor una organización denominada Agrupación Sindical de Trabajadores y Empleados de los Campos Deportivos de la Ciudad Universitaria; esta agrupación se afilió a la Federación de Trabajadores del Distrito Federal y a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), organización a la que le fue concedido el registro sindical de inmediato. Sin embargo, el Sindicato de Trabajadores de la UNAM le presentó al Rector Nabor Carrillo una propuesta, la cual fue aceptada, en la que le solicitaban que el Estadio fuera una fuente de trabajo para el personal administrativo de la Universidad Nacional y con esto se dieron las condiciones para el surgimiento del Sindicato Único de Trabajadores de Espectáculos Públicos en Ciudad Universitaria (SUTEPCU), por lo que el seis de agosto de 1955 se constituyó y solicitó el registro sindical que también le fue concedido a pesar de la opinión de algunas autoridades universitarias que se encontraban satisfechas de que al STUNAM se le había negado el mismo. Aquella agrupación quedó registrado como Sindicato de Industria (no de Empresa), lo que quiere decir que podía contratar con cualquier persona física o moral que presentara espectáculos o eventos deportivos en el estadio e instalaciones de Ciudad Universitaria. El mismo seis de agosto presentó su último informe de actividades Roberto Ramos Vigueras, quien hasta ese momento había sido el Representante de los Empleados ante el Consejo Universitario y fue quien más contribuyó con sus gestiones ante diversas autoridades para lograr la reincorporación de todo el personal universitario docente y administrativo a formar parte de la Dirección de Pensiones Civiles. Luego de que en julio se realizaran las elecciones para determinar quién sería el nuevo Representante de los Empleados ante el Consejo Universitario, el dieciséis de agosto tomaron posesión Joaquín Laguna como Representante Propietario y Gonzalo N. Vásquez como Suplente. En el Boletín del STUNAM del mes de octubre se informaba lo siguiente: “...en Asamblea Extraordinaria del Consejo Sindical se acordó que debido al desastre nacional, ocasionado por los últimos ciclones, los trabajadores de la Universidad Nacional, debían responder contribuyendo con su grano de arena para mitigar en parte las necesidades de sus hermanos que sufrían las consecuencias del fenómeno meteorológico y que comprendían los Estados de Tamaulipas, Veracruz, San Luis Potosí, Hidalgo y Quintana Roo. Además se haría un descuento en la siguiente quincena de $3.00 a los sueldos menores de $500.00 y de $7.00 a los sueldos mayores de $500.00”. Se invitaba también a los compañeros no sindicalizados a sumarse a esa ayuda dando sus datos a Joaquín Laguna Cruz, Jefe de la Oficina de Nóminas, o a Luis Padilla Sánchez, en la Oficina de Cuenta de Alumnos, en el Edificio de la Rectoría en Ciudad Universitaria. El once de noviembre de 1955 se llevó a cabo la Asamblea Electoral del STUNAM resultando electa la Planilla que dirigía Gonzalo Nicanor Vásquez Montaño que contendió con la planilla de Cornelio Rosas Aceves. El nuevo Comité Ejecutivo estaba comprendido de la siguiente manera: Secretario General, Gonzalo N. Vásquez Montaño; Secretario del Interior, Martín Hernández Granados; Secretario del Exterior, Luis Solares Barrios; Secretario de Trabajo, Conflictos y Escalafón, Macedonio Matus Fuentes; Secretario de Organización y Propaganda, Porfirio Vielma Andrade; Secretario de Actas y Acuerdos, Alfredo Aldana; Secretaria de Estadísticas y Finanzas, Ma. Elena Pérez Márquez de Fernández; Secretaria de Acción Femenil, Ernestina Soto Lara; Secretario de Acción Deportiva, Sergio Dublán Somellera. Consejo de Vigilancia y Fiscalización: Dr. Juan Coloffón Nájera, Presidente; María del Refugio Rentaría y Alfonso Bravo Chávez, Vocales. Comisión de Honor y Justicia: Francisco Sánchez Juárez, Presidente; Gabriela A. García Cortés y Emilio Iglesias, Secretarios. En el Boletín Mensual # 1 del diez de diciembre se mencionaba la forma en que atenderían los asuntos, los diferentes Secretarios del Comité Ejecutivo, sus horarios y días de atención en el domicilio social de Justo Sierra # 13 Altos. Además de la solicitud que se había hecho al Rector de la Universidad, al Secretario General y al Tesorero de la misma reiterando la petición de la gratificación anual, así como que ésta y las dos quincenas de diciembre se pagarían en un solo cheque antes de salir de vacaciones. Señalaban también que se habían incrementado las afiliaciones y su agradecimiento al Rector Nabor Carrillo por el ofrecimiento de tratar de que se incrementara la gratificación anual. El SUTEPCU y el STUNAM habían hecho un pacto moral en el sentido de que si algún trabajador se afiliaba a uno de los sindicatos automáticamente se le daba de alta en el otro y si renunciaba a uno también se le daba de baja en el otro. El ex Secretario General, Cornelio Rosas Aceves, al perder las elecciones renunció al STUNAM “por así convenir a sus intereses” el nueve de diciembre de 1955 (automáticamente perdió su carácter de Secretario General del SUTEPCU, y con él renunciaron algunos trabajadores seguidores suyos); fue electo en su lugar como Secretario General del Sindicato de Espectáculos Martín Moreno Millán, que era al mismo tiempo Secretario de Acción Deportiva del STUNAM. Así mismo, en las instalaciones del STUNAM se destinó un espacio al SUTEPCU. En el mismo acto se formó la Comisión de Vigilancia y Control de Trabajo con el objeto de evitar favoritismo en la distribución del trabajo. En el mes de abril una Comisión integrada por miembros del Comité Ejecutivo del STUNAM y grupos de estudiantes y profesores se entrevistaron con el Director de Tránsito del D.F. para solicitarle que los camiones urbanos entraran al Circuito de la Ciudad Universitaria, a fin de transportar a la comunidad universitaria hacia cada una de las dependencias. Tiempo más tarde los camiones urbanos comenzaran a dar servicio gratuito dentro de las instalaciones de Ciudad Universitaria. En junio de 1956 durante el Banquete conmemorativo del Día del Trabajador Universitario el Rector Dr. Nabor Carrillo ofreció que se les incrementaría el salario en un diez por ciento a los trabajadores de la UNAM. Sin embargo, al llegar agosto aún no se les pagaba, por lo que en entrevista con el Comité Ejecutivo el día tres de ese mes se les ofreció que les sería pagado en el transcurso del mes y que iba a girar instrucciones para que el Dr. Rubén Vasconcelos, Secretario General de la Universidad, estudiara y resolviera lo relativo al Escalafón. En relación al Servicio Médico, el Lic. Vasconcelos y el Dr. Coloffón Nájera, representante del STUNAM, presentarían sus conclusiones. Se informaba que el Proyecto de Escalafón que iba a elaborar una Comisión designada por el Consejo Sindical ya estaba terminado y sería entregado a los delegados para que se comenzara a discutir en Asamblea del Consejo Sindical a partir del diecisiete de agosto. Más adelante el STUNAM informaba, en su Boletín del diecinueve de noviembre, que en la entrevista que tuvieron con el Rector Nabor Carrillo el viernes dieciséis del mismo mes se les había informado que por acuerdo con el Presidente de la República se otorgaría un mes de “aguinaldo o compensación anual” como se les había concedido a los Trabajadores al Servicio del Estado el año anterior. Por otro lado, también se comprometió a apoyar la petición que se le hiciera al Dr. Morones Prieto, Secretario de Salubridad, para que se atendiera a los trabajadores de la Universidad en lo que se refiere a intervención quirúrgica y hospitalización en el Hospital para Trabajadores al Servicio del Estado, que funcionaba en San Jacinto desde 1951. Se indicaba que se habían hecho gestiones ante don José Vivanco para la instalación de una tienda de la Compañía Exportadora e Importadora Mexicana S.A. (C.E.I.M.S.A.) en donde los trabajadores de la Universidad podrían adquirir artículos de primera necesidad, y sólo hacía falta determinar en qué lugar se instalaría. Por acuerdo del Consejo Sindical se solicitó al Rector que se formara una Comisión Mixta para redactar el Estatuto que regiría las relaciones laborales en la Universidad y que estaba pendiente desde 1945. Finalmente, se hacía del conocimiento de los trabajadores que el Comité Ejecutivo estaba luchando ante la Dirección de Pensiones Civiles para que se otorgara una mayor cuota de departamentos en el “Multifamiliar Tlalpan”, tomando en cuenta la cercanía con la Ciudad Universitaria y el problema sobre la escasez de habitaciones y vivienda en el perímetro del Pedregal de San Ángel. A principios de enero de 1957, el Comité Ejecutivo y el Consejo Sindical en entrevista con el Rector Nabor Carrillo le solicitaron un nuevo incremento salarial del 10%. En el Boletín del treinta y uno de enero de ese mismo año se mencionaba que las gestiones sobre la necesidad que tenían de vivienda cercana a la Ciudad Universitaria continuaban y se estaba solicitando también para los multifamiliares de la colonia Doctores y en Tacubaya, así como lograr facilidades para adquirir viviendas de las que se estaban construyendo en el Fraccionamiento Balbuena. En el mismo Boletín se informaba sobre el acuerdo del Consejo Sindical de aceptar la invitación para participar en el Homenaje a las Constituciones de 1857 y de 1917 el día cinco de febrero en el Zócalo a las 9 A.M., en conmemoración del Centenario y Cincuentenario de las mismas. A principios de marzo en un nuevo Boletín se dio a conocer que en la Asamblea del día ocho de ese mes el Comité Ejecutivo había presentado un proyecto de “Seguro Sindical de Defunción y de Jubilación”, consistente en otorgar $500.00 a los familiares del trabajador que fallezca y $500.00 a los trabajadores que se jubilen (sólo para quienes tuvieran por lo menos dos años como sindicalizados) serían cubiertos de las cuotas sindicales. Con esta propuesta –aún cuando la misma no se llevó a cabo- se hace manifiesta la necesidad de recibir una ayuda económica debido a los bajos salarios y falta de prestaciones, independientemente de que ya contaban con el apoyo de la Ley de Pensiones Civiles. También en marzo en la Asamblea General de Socios del Seguro del Empleado de la Universidad Nacional Autónoma de México se tomó el acuerdo de transformarse en la Mutualidad de los Empleados de la Universidad Nacional Autónoma de México. En la sesión se aprobó el Reglamento de la Mutualidad que constaba de 15 Artículos y 7 Transitorios; el Reglamento entraba en vigor a partir del quince de marzo y se derogaba el Reglamento del Seguro del Empleado de la UNAM de 1953. En el Artículo 10 se indicaba que la Directiva de la Mutualidad se integraría por 5 personas: el Presidente sería el Jefe del Departamento de Personal y el Secretario sería el Jefe de la Oficina de Nóminas; los otros dos miembros serían el Representante de los Empleados ante el Consejo Universitario y el Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (que en ese momento era Gonzalo N. Vásquez Montaño) y, a su vez, estos cuatro miembros una vez que tomaran posesión elegirían, de común acuerdo, al quinto miembro. Bajo esa estructura, el Presidente era Antonio Ríos Pérez y el Secretario Joaquín Laguna Cruz. El seis de abril se llevó a cabo la Asamblea Electoral del Sindicato Único de Trabajadores de Espectáculos Públicos en Ciudad Universitaria en el Salón de Actos del Sindicato de Artes Gráficas, ubicado en la calle de Héroes # 22, en la que se llevaron a cabo elecciones para un nuevo Comité Ejecutivo del que era Secretario General Martín Moreno Millán, prorrogándosele el mandato a este último por dos años más. En el mismo acto la dirigencia acordó afiliar al SUTEPCU a la Federación de Trabajadores del Distrito Federal (FTDF); en realidad eso se haría con el desconocimiento de la base trabajadora, por lo que tuvieron que dar marcha atrás. En el mismo mes la Directiva de la Mutualidad de los Empleados de la UNAM, enviaron a sus miembros una circular con la que hacían llegar un ejemplar del Reglamento de la misma, a fin de que les sirviera de consulta; en el documento señalaban que de manera verbal y oportuna se hizo del conocimiento de la mayoría de los integrantes el porqué se modificaba lo que antes se conocía como el Seguro del Empleado Universitario y de los beneficios que traería ese nuevo formato de organización. Se informaba, además, que para el nombramiento del Quinto Miembro Directivo se designó al señor Federico Barajas Lozano, de conformidad con el Artículo 10 del Reglamento, firmando Antonio Ríos Pérez y Joaquín Laguna Cruz, Presidente y Secretario respectivamente; además, en el Artículo 7º se establecía que se derogaba el Reglamento expedido en diciembre de 1953, que normaba el Seguro del Empleado Universitario. En mayo de 1957 el Comité Ejecutivo del STUNAM hizo una síntesis sobre las labores desarrolladas desde su toma de posesión en noviembre de 1955; ahí se informaba que se habían afiliado a la organización 258 nuevos socios; la tradicional entrega de juguetes para los hijos de los trabajadores universitarios, la realización de elecciones de delegados durante el mes de febrero y su toma de protesta el diecinueve de marzo de 1956. Las autoridades universitarias ordenaron la realización de exámenes psicológicos a todo el personal, por lo que el Comité Ejecutivo en entrevista con el Rector Dr. Carrillo se solicitó que estos exámenes se aplicaran al personal de nuevo ingreso, ya que sería injusto aplicarlo al resto del personal que ya tenía varios años laborando, teniendo como resultado que se suspendieran los exámenes y se invalidaran los que ya se habían realizado. También se mencionaba que en abril de 1956 se solicitó un aumento salarial al Rector y este fue concedido en un 10%; además, se informaba que en enero de 1957 ya se había solicitado un nuevo incremento por el alto costo de la vida, situación que estaba pendiente de resolverse. Las relaciones con la Dirección de Pensiones Civiles prosperaron, ya que se logró que se dieran facilidades a los empleados para la adquisición de departamentos en los multifamiliares que otorgaba esa Dependencia, así como facilidades para hacer uso de los Hoteles de Descanso que Pensiones tenía en Acapulco y Veracruz -en vista de que antes había restricciones debido a las vacaciones de mayo y diciembre de los empleados federales-, trámites más ágiles a las jubilaciones de los trabajadores universitarios y la construcción de un multifamiliar que se destinaría exclusivamente a los servidores de la UNAM, en vista de la escasez de viviendas por el Pedregal de San Ángel, esto último como una medida transitoria mientras se resolvía definitivamente el asunto de los terrenos. También se solicitó al Director de Pensiones que se tomara en cuenta a los trabajadores de la Universidad para que pudieran adquirir casas que había construido esa dependencia en el Fraccionamiento de Balbuena. Sobre ese mismo asunto se informaba que se habían logrado conseguir tres departamentos en el multifamiliar “La Libertad”. Con respecto a los transportes en la Ciudad Universitaria que originalmente tenían su Terminal en el estacionamiento de la Facultad de Humanidades, se logró con el apoyo de estudiantes y maestros que los camiones de las diversas rutas hicieran el recorrido por todo el circuito para evitar que la comunidad hiciera grandes recorridos para abordar los autobuses; así mismo, se informaba que se habían hecho varias solicitudes al Director de Servicios de Transportes Eléctricos solicitándole que se aprobara un proyecto que existía para que los tranvías y trolebuses llegaran hasta la CU. En el mes de septiembre previo a las elecciones sindicales circuló el periódico Superación del grupo “Depurador”. Ahí se indicaba que los problemas de los trabajadores universitarios a resolverse a corto o largo plazo eran: “1.- Terrenos para los trabajadores, que era una esperanza de algo que se había mencionado por el traslado a las nuevas instalaciones en Ciudad Universitaria. 2.- Guardería Infantil, que solucionaría la preocupación que tenían las madres trabajadoras para sus hijos y el gran problema que para ellos encerraba dejarlos solos. 3.- Sanatorio, imprescindible como medio de seguridad a la salud para el trabajador y sus familiares. 4.- Escalafón, que no se cumplía, ya que algunas autoridades de las distintas dependencias hacían favoritismo. 5.- Tienda popular. 6.- Deportes. 7.- Descanso los sábados”. En la Revista Lucha del STUNAM se reprodujo el siguiente texto: “Los reglamentos especiales a que se encuentran sujetos los trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, no pueden privarlos de los derechos de la Ley Federal del Trabajo, como lo previene la propia Ley Orgánica de la Universidad. Resolución del 21 de octubre de 1957. Suprema Corte de Justicia de la Nación”. En octubre los representantes legales de la Universidad Nacional solicitaron un Amparo en contra del otorgamiento de Registro Sindical al SUTEPCU, pero su petición fue desechada. El once de noviembre de 1957, se efectuó la Asamblea Electoral del STUNAM, misma que fue ganada por la Planilla Verde encabezada por J. Luis Padilla Sánchez en contra de la Planilla que encabezaba Alfonso Bravo Chávez. El Comité Ejecutivo se constituyó de la siguiente manera: Secretario General, José Luis Padilla Sánchez; Secretario del Interior, Juan Peña Arenales; Secretario del Exterior, Jesús García Lara; Secretario de Trabajo, Conflictos y Escalafón, Rodrigo Tinoco Cíntora; Secretario de Organización y Propaganda, Víctor Ramírez; Secretario de Actas y Acuerdos, Cutberto Letechipia; Secretaria de Estadísticas y Finanzas, Mercedes Bernal Torres; Secretario de Acción Deportiva, Efrén Noches Hernández. Consejo de Vigilancia y Fiscalización: Genaro Ramos, Presidente; Luis Cruz Rodríguez y Adauto Sánchez, Vocales. Comisión de Honor y Justicia: Guillermo Saint Martín, Presidente; Ramón Rivas Rocha y Ángel Quiroz Morales, Vocales. En febrero de 1958, el Comité Ejecutivo solicitó un incremento salarial del 10%. En oficio del veintiocho de mayo de 1958, el Rector Dr. Carrillo indicaba lo siguiente: “Me es muy grato informarles que ya se ha obtenido del Estado el subsidio necesario para que, a partir del 1° de julio, se logre la nivelación en los sueldos de los profesores y empleados de la universidad, culminando así el proceso de integración que se inició en 1954 en adelante, serán aplicables a todos los que sirven a la Universidad, cualquiera que sea la Escuela o Dependencia de la misma, con el noble objeto de lograr la unidad universitaria”. Culminaba así una demanda que había sido planteada por el STUNAM en el sentido de que debía ser igual el salario de los trabajadores universitarios independientemente de estar en la Ciudad de México o en la Ciudad Universitaria. El catorce de julio de 1958 tomaron posesión los representantes de los Empleados ante el Consejo Universitario Manuel Barranco Palacios (Propietario) y José Luis Padilla Sánchez (Suplente), quienes habían resultado electos. En esa misma fecha se informó al STUNAM del incremento salarial que habían solicitado a principios de año. Al finalizar el año lectivo de 1958, la Dirección General de la Escuela Nacional Preparatoria envió una carta a los profesores que originalmente habían sido contratados como provisionales o interinos, en la que se les agradecía sus servicios. Esto ocasionó que los mentores protestaran por medio de la Federación de Profesores de la Escuela Nacional Preparatoria, que hizo un llamado de atención a las autoridades universitarias sobre las normas que chocaban con la letra de los preceptos legales existentes en la Universidad. Hubo pláticas entre los dirigentes de la Federación que estaba encabezada por los profesores José Villafuerte Mijangos, Alfredo Briseño, Marcial Portilla y Octavio González Cárdenas. La situación se resolvió logrando que no se volvieran a enviar esas cartas a los profesores con más de tres años de servicios ininterrumpidos. Por otra aparte, es importante señalar que para 1958 ya había 3024 plazas administrativas en la UNAM. El treinta y uno de marzo de 1959 en el SUTEPCU se realizaron elecciones, resultando elegido Martín Hernández Granados como Secretario General. El veintidós de agosto, con base en un acuerdo del Consejo Sindical, se entregó un oficio al Rector con un Pliego Petitorio en el que se pueden apreciar una serie de demandas del STUNAM. Sin embargo, por alguna razón un grupo de delegados creía que no se había efectuado la entrega, por lo que decidieron elaborar una Carta Abierta un mes después. Un grupo de trabajadores de las preparatorias 1, 2, 3, 4 y 5 le enviaron al Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la UNAM una Carta Abierta el veintiséis de septiembre, en forma de carteles, en la que le señalaban que estaban al pendiente de los acuerdos tomados por el Consejo Sindical en donde se resolvió que se le entregara al Rector un Pliego Petitorio con los siguientes puntos: “a) La integración de una Comisión formada por los señores Manuel Barranco Palacios, Pedro Armas Rojas y Usted en calidad de Secretario General para intervenir y discutir en unión de la Comisión nombrada por las autoridades sobre la forma en que se pagará el aumento de sueldos a los Empleados de la Universidad, que en ningún caso será inferior al porcentaje y proporción en que se concedió a los Trabajadores al Servicio del Estado, sin excluir a los empleados Supernumerarios. Esto mismo anunció usted en el Boletín del 22 de agosto del año actual, lanzado por el Comité Ejecutivo. En la parte inferior de la Carta Abierta se exponía la argumentación a los puntos mencionados en el Pliego Petitorio: “Con relación a los sueldos, el señor Rector ha repetido siempre que cualquier beneficio que obtengan los Trabajadores al Servicio del Estado, también los percibirán los trabajadores de la Universidad, seguramente tomando en consideración la similitud de labores. Usted lo volvió a confirmar en el Boletín a que nos hemos referido. La retabulación general es indispensable porque hay trabajadores como en la rama de servidumbre que se consideran mozos de primera y tienen menor sueldo de otros de la misma categoría en otras Dependencias de la misma Universidad, aún cuando desempeñan el mismo trabajo y la misma responsabilidad, como ya lo decimos. Como caso concreto esta el de la Escuela Nacional de Medicina, y hay otros casos de carácter administrativo, y que en su oportunidad señalaremos. Urge y es de imperiosa necesidad para proteger a los antiguos trabajadores de la Universidad la aprobación del Reglamento de Escalafón porque se ha visto con tristeza que los movimientos o ascensos no se realizan por méritos del trabajador, sino en la mayoría de los casos se hacen por simpatía o favoritismo. Como caso concreto tenemos lo que ocurrió en el Patronato (Universitario), pues en el ejercicio presupuestal 1957-1958, muchos empleados sufrieron un aumento en algunos casos de hasta de un 40%, mientras que todas las demás Dependencias de la Universidad no hubo ninguna mejoría. Hace años que la Universidad como cualquier otra Dependencia, descuenta y sanciona a sus empleados que faltan al cumplimiento de sus deberes, en contra de lo dispuesto por el artículo 91 de la Ley Federal del Trabajo; pero en cambio a los que si cumplen y han entregado su vida al servicio de la Universidad, nunca han sentido un estímulo de parte de los representantes de las Autoridades de la misma Institución. Por estas razones todos los empleados estamos pendientes de la solución de los anteriores puntos petitorios, que son fundamentales no sólo para los trabajadores, sino para la vida misma de la Universidad, pues los que prestamos nuestros servicios en ésta, todos hemos demostrado nuestra calidad moral y sentido de responsabilidad y hemos contribuido con nuestro grano de arena y desde el más modesto puesto, a formar a la juventud que es la esperanza de la Patria y en cuyas manos, más tarde, estarán los destinos de México. Por eso, es lamentable también que mientras a los trabajadores del sector burocrático y de otras Instituciones Descentralizadas afianzan y logran conquistas, los trabajadores de la Universidad permanecemos al margen de la Ley. Usted con la representación de que está investido como Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, es el indicado para defender, con entereza y virilidad nuestros derechos, propugnando para que sea una realidad inmediata el mejoramiento de los trabajadores universitarios, reiteramos por ello una vez más nuestro decidido apoyo moral y material”. Sin embargo todo eso ya había sido efectuado por el Comité Ejecutivo dirigido por Luis Padilla Sánchez, quien logró incluso un incremento no del 10% sino del 15%; otro beneficio fue que al personal Supernumerario que existía hasta 1958 se le considerara en el nuevo presupuesto 1959-1960 como de planta con todos los derechos que implicaba su nombramiento. En lo relativo a la atención médica y necesidades hospitalarias e intervenciones quirúrgicas de los trabajadores universitarios se consiguió que se incrementara la partida que era de $77,000.00, argumentando que la cantidad reunida por los descuentos que se hacen por retardos y faltas podía servir para solucionar ese déficit. Así se obtuvo un incremento de aproximadamente medio millón de pesos. También se logró el acuerdo de establecer un Centro de Salud en Ciudad Universitaria, además de la construcción de la Guardería Infantil. Antes de concluir su gestión Luis Padilla Sánchez logró que se realizara la unificación de los grupos sindicales de los cuatro ex secretarios generales (Alfonso Lobato Salas, Cornelio Rosas Aceves, Pedro Armas Rojas, Gonzalo N. Vásquez) y se volvieran a afiliar varios trabajadores que por diferencias habían abandonado al STUNAM, poniendo fin a luchas estériles y a la falta de apoyo a la organización de los trabajadores universitarios. Así, durante el período sindical de Padilla Sánchez la membresía se incrementó en 295 nuevos elementos para hacer un total de 1460 miembros. Es interesante conocer que recibió del Comité anterior un total de $13,008.83 y al término de su período dejo la cantidad de $31,265.81. (Quien escribe estas líneas tuvo la oportunidad de conocer a Luis Padilla Sánchez y contar con su amistad. Él llevaba consigo un anillo que le fue entregado como Secretario General del STUNAM, y aun cuando no permitió que se le realizara una entrevista formal, me indicó -a manera de comentario- que cuando llevaba la solicitud de un incremento salarial la respuesta del Rector Garrido era “a mí no me venga con esas tonterías de sindicato, a mí dígame cuanto quieren y ya veremos cuanto se les puede otorgar”, ese era el trato no formal que recibía la organización por aquella reforma laboral que existía en el sentido de que los trabajadores sujetos a estatutos especiales no tenían derecho a formar sindicatos). |
||||